La motivación laboral es un aspecto que se ha vuelto prioridad para los líderes de las empresas y de los diferentes equipos de trabajo. Aun más a partir de la pandemia, donde la importancia al tiempo que se le dedica a que todos los integrantes de una organización se mantengan motivados, ha crecido exponencialmente.
Diferentes estudios han comprobado que los colaboradores motivados son más felices, por lo que consecuentemente también son más productivos. Es aquí donde radica la relevancia que los líderes le otorgan a este tema.
¿Qué es la motivación laboral?
Previamente a hablar sobre la motivación empresarial, es necesario definirla. En una primera instancia, podemos establecer a la motivación como la fuerza o la sensación que impulsa a una persona a actuar, de manera voluntaria, de determinada forma frente a una determinada situación. Si la trasladamos al ámbito laboral, podemos decir que son aquellos impulsos, acciones o normas que llevan a que los integrantes de una empresa actúen de forma positiva al momento de trabajar.
Tipos de motivación en el trabajo
Existen varios modos de clasificar la motivación de los empleados. En primer lugar, a partir del origen que tenga la motivación. Esta puede ser de origen extrínseco o intrínseco. La motivación extrínseca refiere a situaciones en las que la motivación se desarrolla mediante factores o influencias externas al trabajador. Por ejemplo, el dinero, la aprobación o el reconocimiento de pares o la posibilidad de un ascenso laboral.
Mientras tanto, la motivación intrínseca acude a una motivación personal en el trabajo, ya que es aquella que se da por factores internos a la persona. Algunos de estos factores pueden ser la posibilidad de aprender, la satisfacción con la tarea realizada o el sentido de pertenencia con la organización en la que una persona trabaja.
Motivación positiva o negativa
En un segundo plano, la motivación también puede clasificarse según el estímulo que la provoque. En este sentido, podemos encontrar, por un lado, la motivación positiva. Esta es la que generalmente conocemos: son los casos en los que la motivación laboral se debe a una recompensa. Es importante aclarar que no tiene por qué ser económica, ya que la motivación también puede deberse a un reconocimiento social.
Por otro lado, está la motivación negativa. Esta se da cuando el factor motivador es una amenaza, castigo o similar. De cualquier modo, es cada vez menos común encontrar este tipo de motivación en las empresas o al menos que sean calificadas como tal.
Reconocimiento y motivación laboral
Técnicas de motivación en una empresa
Existen diversas formas de mantener la motivación del personal de trabajo. Son muchas las teorías e ideas que se han formulado con respecto a este tema, por lo que no existe ninguna estrategia que pueda asegurar en un 100% la motivación de todos los integrantes de la organización. Sin embargo, sí hay algunas técnicas que suelen ser exitosas.
La recompensa
La recompensa suele ser de los aspectos más tenidos en cuenta al hablar sobre la motivación. Aquí, se suele partir de la base de que el atractivo de la recompensa es lo que termina impulsando a los integrantes de la empresa a esforzarse para lograr un buen desempeño. Este pensamiento está basado en la teoría de las expectativas del profesor Victor Vroom, que establece que la motivación depende de tres principales variables: el esfuerzo, el desempeño y el atractivo de la recompensa.
Recordemos que la recompensa no siempre implica una remuneración económica. Existen varias formas de motivar a los empleados mediante recompensas y que van más allá de un aumento de salario o una bonificación, como lo pueden ser un ascenso, una extensión de los días de licencia o un simple reconocimiento frente a toda la empresa.
La escucha hacia los empleados
Sin lugar a dudas, considerar la opinión de los empleados a través de entrevistas o encuestas es fundamental para mantener la motivación de estos. A todos nos gusta sentirnos escuchados en todos los ámbitos, pero, definitivamente, la motivación empresarial crece cuando un integrante de la organización realiza una sugerencia o crítica y es tomada en cuenta. Esto no sólo motiva a quien realizó el aporte, sino que también al resto de los integrantes de la empresa, ya que la empresa transmite el mensaje de que todos los empleados son escuchados.
En este sentido, siempre es importante implementar un mecanismo de retroalimentación. No todos tienen la iniciativa de hablar cuando tienen alguna inquietud o problema, por lo que las encuestas o entrevistas de clima suelen ser útiles para lograr conocer la opinión genuina de todos los integrantes de la organización.
Objetivos realistas
Este es otro aspecto indispensable para cualquier equipo que pretenda que sus integrantes estén motivados. Indudablemente, el cumplimiento de objetivos es un motivo de satisfacción para cualquier empleado. Por esta razón, es fundamental que las metas propuestas sean realistas, ya que aquellas inalcanzables pueden llevar a una desmotivación o frustración rápida en los trabajadores.
Como podemos ver, cada empresa puede tener una visión diferente sobre cuál es la mejor manera de mantener a los integrantes de la organización motivados. Lo seguro es que es necesario tener una persona o equipo que se ocupe de ello.